Placebos y más...

lunes, 29 de enero de 2007

Centrifugado, no mezclado

Hoy amanecí con desanimo pero cargado de energía, este ha sido un fin de semana muy completo, hay preocupaciones que sorprenden.

En esta jornada descubrí que existe gente para todo y que la tienes más cerca de lo que uno piensa. Esa gente ya prejuzgada puede sorprender, hasta el punto de ruborizar por tan vergonzante topicazo. Tras soltar oronda carcajada, seguí con mis pensamientos en una tarea rutinaria y reflexiva. Ha sido un risa de dentro, de esas que salen del estomago, sin control, sin mas, primero por lo evidente, pero luego fue de autocomplacencia. ¡Que bien me sentí!

Llevo días sin escuchar nada de mi cajita de música, no me gusta, cuando acabe y me tome la medicina recuperare algún clásico, maestro.

Recordé este fin de semana, Carles cumplió ya, 29 años, que miedo, el próximo el mío. Esto de ser mayor nunca pensé que fuera tan temprano. Me encanto, disfrutamos y sobre todo el homenajeado: “tiu, repetirem, no sabia que era així…” (“tío, repetiremos, no sabia que era así…”). Mi satisfacción fue máxima y ya estaba en cotas altas, realmente lo pasamos genial. Esta raro, ahora me toca ayudarlo a mi, se lo merece tal y como nos decimos a la vuelta de todo: “¡Eres un tío de puta madre!”.

No hace mucho recupere algo que perdí hace mucho, por una tontería (como siempre) y de la que no puedo separarme, ¿porque?. Es parte de mi, no lo supe hasta hace poco, y me gusta. Cuando conoces a alguien tanto es inevitable sentirse así de bien, predecir y que te predigan, que risa de viaje! Hacia tanto que no reía tan seguido, podría decir que ciertos reflejos ciegan de lo que ha estado uno faltado de ellos.

Maestro, lo se. Recuperare todo lo que perdí por las malas enseñanzas, los rencores y orgullos. Prometo llamar, lo prometo, lo siento por Fidel, pero mas por Carme, la llamo, lo prometo.

Disfrute de la preciosa Mercè, la tuve en brazos (gracias Garni!), madre mía que sensación, no tuve por más que repetir tras la comida en una visita al centro de una siesta. ¡Que peleona salió! Pobrecitos e insomnes padres, ya lo dicen ya, sarna con gusto no pica. Felicidades chicos, es un sol.

Tras esta acelerada recuperación de los días perdidos, paso a tomar mi medicina casi diaria de tinta…

miércoles, 17 de enero de 2007

Por el principio

Volví, después de un tiempo y con demasiados planes no realizados (incluídos para este blog), a usar sin más este medio.

Hoy tras todo lo pasado volvía a un estado irascible, por deseos (cómo no) no realizados, frustrado i con ganas de enviarlo todo al carajo. Al fin y al cabo la gente no cambia, eso decia mi sabio padre, cuando hablaba de su mujer, cuanta razón maestro.

Llevo una de las peores semanas del año, justo al inicio cuando las esperanzas, las energías, los cambios y las ilusiones hacen de nosotros unas personas mas vivídas con ganas de comerse el mundo, pues hale! aquí el nene enfrascado en una encrucijada, mientras el trabajo ahoga (pero no mata), los estudios siguen ahi (como promesa que prometedores) y un lío en el centro de uno mismo que pa qué. Suerte de algún atisbo de felicidad, cuando más premeditadamente que casual me imagino en algun marco de puerta satisfaciendo mi voyeurismo o me sorprendo riendo y mirando al cielo recortado por las callejuelas de mi nuevo perímetro diario, el barrio barcelonés del Raval (sí, habéis leido bien, pero esto será otro post). Sigo más apesadumbrado que siendo yo mismo, pero qué le vamos a hacer, ya poca gente recuerda la imagen que tengo de mí mismo, por el tiempo que ya no se refleja en mí. Por suerte hoy hay un pico de alegria: aprobé el examen de conducir, aunque a ciertas edades se tenga que decir con boca chica y riéndose de uno mismo, lo contento que está de una hazaña post-adolescente.

PS: Mañana acabo exámenes calculando, sera como mínimo un buen día.