Placebos y más...

lunes, 19 de marzo de 2007

Francesc Xavier Sampietro Perelló

Massa ja, massa. Mirada cansada, marró, marró fosc. Ulleres de pasta fosques, clàssiques del teu estil i just a sota: el mostatxo, gran, atapeït, pelut. El somriure de llavi inferior permanent acompanyat de les arrugues dels ulls. Canes pentinades de costat i ondulades en aquesta mata de pèls rollo cuéntame. No tens ni idea, ho vem parlar i tot, però no.

Conversador incansable, argumentador temible, raonable, reflexiu i sobretot, sobretot una font inesgotable de bons consells.

Estimat i conegut per molts, admirat en moltes facetes, simple sense complicacions i assequible per tothom. Amb respostes a tot i sinceritats a lo desconegut. Irònic, sarcàstic, divertit, preocupat, introvertit. Cuidant a tothom i alhora donant la opció de què s’equivoquessin sense càstig, amb una solució millor, difícil però millor.

La primera època d’emocions intenses, recordes el banc de fuster? Bo el consell, procuraré no cometre els mateixos errors! La segona evident, lògica i entesa, tranquil esta tot més que parlat. La tercera malgrat que curta, la millor. Intensa, conscient, madura, a temps i recuperant tot el que vem perdre, perfecta, trista, final.

Et trobo molt a faltar, et necessito no saps quant. Els consells molt bons, s’estan acabant però encara en queden. Els records intactes, especials, únics. La sensibilitat atàvica, forta, extranya. El caràcter combinat, modelat i empàtic. Et necessito, hem fa falta aprendre més, aprendre amb tu, aprendre de tu. Et trobo molt a faltar, no saps com.

Cuida’t molt, per aquí tot va sortint. Ah! per cert no pateixis per la moto, posaré seny, ja em coneixes.


NOTA: Perdonarán este cambio de idioma, es personal.

martes, 13 de marzo de 2007

Martes y 13

Hoy un día espléndido como viene siendo habitual, cosa rara en estas fechas, me tuve que recordar lo bien que estoy, a pleno sol. Qué raro, ayer, tenia mucha faena (como hoy), incluso me reservé un par de horas para dedicármelas, no tuve que pensar. Es cierto, lo estoy. Conduje (¡la primera vez y con nota alta!), conocí mucha gente, lo pasé bien pero tuve justificar que fue bueno. Lo hice todo, volví a hablar con la personita que habla como si estuviera contando un secreto y no puedo evitar pensar en volver a mi happytime, pero hoy tuve que recordar.

La felicidad lleva inherente la facultad de ser inconsciente, solo sabes que lo eres, perdón, que lo has sido en tiempo pretérito. Cuando lo eres, no te das ni cuenta, se nota, simplemente disfrutas, no necesitas recordarlo. He sido muy feliz.

Estoy imbuido por una tristeza, pese a mi estado diario y a este solazo que me acompaña, lo estoy. Más bien apático, desilusionado y con fragmentos muy chiquitos de lo que en diciembre creía esperanza. Día a día todo rezuma una realidad y una objetividad que duele pese a todos los esfuerzos por negarla y evitarla. No debería ser así, en un mundo ideal esto nunca sucedería, no, la verdad es que no. Realmente fui muy feliz y lo supe desde el primer día en tiempo presente.

Vuelvo a casa cansado, contento y muy relajado: mi rostro totalmente destensado, los ojos semicerrados, achinados, seleccionando en mi multifuncional mirada la relajación y tranquilidad con la que cruzo las oscuras callejuelas, miro al cielo y el eco de un ¿qué? Me hace reír. No es un mundo ideal simplemente es martes y trece…

viernes, 9 de marzo de 2007

Cese de las actividades

Hoy por fin doy por concluidas (ya tocaba), oficialmente, las celebraciones, visitas, recordatorios, ¿cómo vas?, ¡nos llamamos tío! y demás actos por mi cumpleaños. Tuve de todo ¡hasta me cantaron online el cumpleaños feliz en portugués! (por cierto, no te asustes preciosa, dije muchas tonterías por la emoción, me hago viejo y estoy soltero, me encantó). Estuvo todo el mundo, recibí más de lo que esperaba, lo mejor, en casa. Maestro vamos bien, tenías razón, yo podré, tengo tiempo.

Los regalos, de lo mas diverso: Golosinas, camisetas (¡me gusta mi camiseta!), cenas para recordar, clásicos en dvd, risas, esposas, complicidades y sobretodo libros, dedicados y especiales. Gracias.

“…Sois unos tíos de puta madre…”

miércoles, 7 de marzo de 2007

Sin conversación

Cansado de un largo día vuelvo, sin más premio que una buena cama, a mi casa. Se repite la tónica de estas últimas semanas: cansado, agobiado pero satisfecho e incluso contento. Pese a esto, rezuma en mí un sentimiento de tristeza y resignación latente, interna, permanente. Estoy bien, pero me bloquea, no me gusta.

Hoy una frase al vuelo me rompió por dentro, fue en un tono de voz justo antes de llegar al susurro. Yo tumbado, con los ojos cerrados, me enamoré de una desconocida. “Hauríem d’aprendre a barallar-nos sense fer-nos mal” (“Deberíamos aprender a pelearnos sin hacernos daño”), me emocioné. Era puro amor, sin envoltorios, ni maquillajes, ni condiciones, solo amor. Esa mujer me desarmó. Abrí los ojos, estaba con las piernas entrelazadas y cruzadas sobre el destinatario de la frase. Mientras, se abrazaban y reposaban la cabeza en los hombros del otro, con los ojos cerrados. No lo vi con la mirada, me llegó por el corazón. Lo más bello que he oído en tiempo, quiere estar con él siempre, hasta cuando se pelea. Le ama. Lloré por dentro y les envidie (con avaricia). Sin más, la nostalgia se adueño de mí, acompañándome incluso ahora mientras escucho todo lo que siento.

A la vuelta de noche, lloviznando y con el fresco normal de la época, la plaza del MACBA está vacía, el museo bien iluminado y se oye un taconeo de unas botas preciosas… Belleza. Un par de inevitables emociones líquidas corriendo por mis mejillas.

PS: Gracias por la música, Bob (Jamie, Annie, Antònia, Bebe, …)

sábado, 3 de marzo de 2007

Increible!

Después de una semana densa, llenísima, cansina, con insomnios varios, me pude levantar y además con ganas de postear. Este va a ser un gran fin de semana (o lo que queda de él!, ayer tuve una gran introducción ;)), me lo voy a comer de un solo bocado. Lo mejor de todo, se que puedo.